El mes de diciembre está próximo, y se cierne sobre la cabeza de los funcionarios como una amenaza para sus ya exiguas economías. Un mes tradicionalmente caracterizado por las celebraciones navideñas, los regalos y las comidas de hermandad, se nos presenta ahora como un mes aciago, que anticipa la cuesta de enero y que va a obligar a aumentar las medidas de austeridad como consecuencia de la supresión de la paga extraordinaria de diciembre.
La mayor parte de los funcionarios con unos ingresos notablemente reducidos por las medidas aplicadas por el Gobierno, confiaban en esta paga para hacer frente a los gastos extra que se fueron acumulando a lo largo del año, así como para las compras navideñas y los regalos de reyes.Indudablemente la injusta medida adoptada por el Gobierno que hace pivotar sobre el empleo público los efectos de la crisis, no tendrá la misma incidencia en todos los funcionarios. Dependerá de su situación patrimonial, de sus compromisos financieros, del número de familiares a cargo, etcétera. Sin embargo, todos, con independencia del quebranto que la supresión de la paga extra pueda suponerles, debieran afrontar las fiestas navideñas con una misma actitud de austeridad, restringiendo al máximo sus gastos para reivindicar ante la sociedad el importantísimo papel que vienen jugando en la dinamización de la vida económica y en el mantenimiento del consumo. No hacerlo, minimizaría los efectos de esta medida y podría animar al Gobierno a repetirla el próximo año.
Cuando en este mismo medio publicábamos el artículo titulado “Montoro, los funcionarios y la empresa privada”, adelantábamos que una de las actuaciones de mayor impacto que podían plantear los funcionarios ante la supresión de la paga extra de navidad, pasaba por limitar al máximo los gastos en alimentación y regalos y eliminar las comidas de hermandad. En lo que atañe a los regalos será una empresa difícil cuando se tengan hijos de corta edad a los que no se les podrá privar radicalmente de la ilusión de los Reyes Magos, pues sería difícil explicarles la causa de tal ausencia –los niños, afortunadamente, no entienden de política-, pero en lo que se refiere a la alimentación, es una meta fácilmente ejecutable. Se trata, como anticipábamos en el mencionado artículo, de elaborar un menú del funcionario para las fiestas navideñas en el que, sin renunciar a las celebraciones al uso, se eliminaran los productos tradicionales sustituyéndolos por otros de consumo ordinario, adecuadamente combinados y con un coste notablemente inferior.
La red está plagada de recetas económicas y, por tanto, nada nuevo aportamos si sugerimos un menú para esos días. Pero a veces la pereza, otras la indiferencia, en ocasiones las propias demandas familiares, impiden disponer del tiempo y del ánimo suficientes para meditar sobre esta cuestión y concretar las pretensiones. Por ello, nos hemos permitido elaborar un menú navideño tomando como referencia recetas tradicionales de elaboración casera cuyo coste no supera los 20€ por menú para cuatro comensales.
ENTRANTES
- Espárragos envueltos en jamón cocido
- Endivias con sucedáneo de caviar
- Brochetas de jamón, queso y menta
- Bolas de queso filadelfia bañadas en coco
- Cucharita de albaricoques rellenos de pollo
- Cucharita de mejillones
- Cucharita de tomate seco y atún
- Brochetas de plátano con chocolate
- Croquetas
- Dados de tortilla
- Dátiles rellenos de queso
- Cuadraditos de queso de Burgos con aceituna y anchoa
MENÚ DE NOCHEBUENA
- Sopa de almendras
- Cóctail de langostinos con mango
- Pollo relleno de orejones y uvas pasas sobre una cama de patata panadera
- Mousse de limón
COMIDA DE NAVIDAD
- Consomé de pollo
- Arroz caldoso con setas
- Pimientos rellenos de bacalao
- Frixuelos rellenos de crema pastelera
MENÚ DE NOCHEVIEJA
- Crema de calabacín
- Revuelto de ajos tiernos y gambas
- Conejo con uvas moscatel
- Pastel de zanahoria
COMIDA AÑO NUEVO
- Sopa de ajo
- Ensalada de frutas con yogur
- Brocheta de pescado
- Arroz con leche
Bebida: Agua, sidra natural y para los postres sidra achampanada
Felices fiestas y buen provecho.
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